Tras su sorpresiva eliminación la temporada pasada en la 2ª Ronda de la fase previa frente al Shakhter Karagandy kazajo, el BATE Borisov regresa al bombo de la Liga de Campeones después de su contundente victoria en el Borisov Arena de Minsk por 3-0 frente al Slovan de Bratislava. Llegaban los bielorrusos con ventaja en la eliminatoria después del 1-1 logrado en el partido de ida celebrado en el Štadión Pasienky de la capital eslovaca, donde un gol de Róbert Vittek en el tramo final del encuentro dejaba con vida al Slovan. Sin embargo, el conjunto local dirigido por Aleksandr Yermakovich salió mucho más metido y combativo al partido, a pesar de la necesidad de los eslovacos de remontar la eliminatoria.
Pronto empezaría al BATE a merondear por la portería de Dušan Perniš. En el minuto 14 de partido, un pase en largo y perfectamente medido de Dmitri Likhtarovich llegaría a los pies de Rodionov, quien tras un excelente control y una ortodoxa conducción a punto estuvo de colocar el balón en las mallas con la puntera de su pie derecho, pero la pelota se estrelló contra el poste. Seguiría insistiendo Rodionov con sus internadas desde la izquierda hacia el centro, pero su disparo esta vez no encontró portería. A pesar del dominio local, el Slovan dispondría de algunas ocasiones para adelantarse en el marcador por medio de Pavel Fořt, pero su testarazo llegó manso a las manos de Sergei Chernik. Las ocasiones esporádicas de los hombres de František Straka no inquietarían el dominio del BATE, quien volcaba su juego por la banda izquierda, esta vez con una peligrosa internada de Mladenović.
Sin embargo, cuando la primera parte agonizaba, el capitán Likhtarovich robó un balón en el medio del campo a Soumah y buscó a Rodionov, quien con una excelente maniobra individual asistió a Mikahil Gordeychuk para que hiciera el primer tanto del partido. A pesar de irse perdiendo al descanso, el Slovan de Bratislava no bajaría los brazos. Prueba de ello fue la salida en tromba de los eslovacos en el principio del segundo período, que a punto estuvo de costarle caro al conjunto local. Fue a la salida de un córner, en el minuto 53, cuando una volea de Pavel Fořt y el rechace posterior de Nicolás Gorosito obligaron a Chernik a engrandecerse bajo los palos. La decisiva intervención del arquero bielorruso hizo despertar a los hombres de Yermakovich, que volvieron a llegar con peligro a la portería visitante por medio de un sublime Rodionov, cuya volea se estrellaría en el travesaño.
Las esperanzas del Slovan se desvanecerían de manera definitiva en el minuto 79, cuando el árbitro alemán Wolfgang Stark decidió expulsar a Seydouba Soumah por doble amarilla, tras una entrada a destiempo sobre el lateral diestro Anri Khagush. Con el conjunto eslovaco con diez jugadores, el BATE se decidió a asestar el golpe definitivo a la eliminatoria, que llegaría de la mano de Sergei Krivets en el minuto 84 del partido, tras una excelente internada por la izquierda de Andrii Yakovlev. Un minuto después, Vitali Rodionov redondearía una actuación individual sensacional con un remate cruzado a la cepa del poste izquierdo de la portería defendida por Dušan Perniš, sentenciando de manera definitiva la eliminatoria y llevando el delirio a las aborratadas gradas por los 13.000 fieles bielorrusos. No era para menos. El BATE Borisov estará, por cuarta vez en su historia, en la fase de grupos de la Champions.
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